Chase inauguró su nuevo Sapphire Lounge en el Aeropuerto Internacional Harry Reid (LAS) de Las Vegas hoy, 3 de diciembre. El espacio de 4,600 pies cuadrados, ubicado en el vestíbulo C de la Terminal 1, ofrece una experiencia de viaje refinada con un enfoque en bebidas premium y comidas en un ambiente deliberadamente pequeño. Con solo 87 asientos, el salón está diseñado para ofrecer exclusividad en lugar de gran capacidad.

Ubicación Estratégica y Acceso

La sala VIP es más conveniente para los pasajeros que vuelan con Southwest, Allegiant y Spirit desde la Terminal 1, aunque también es accesible para viajeros de American y Delta a través de una conexión de tren en la zona de operaciones. Su horario es de 4:30 am a 11:00 pm todos los días. El acceso se otorga a los titulares de tarjetas Chase Sapphire Reserve y J.P. Morgan Reserve (se aplican tarifas de huésped), a los titulares de tarjetas Ritz-Carlton (que disfrutan de invitados gratuitos ilimitados) y a los miembros de Priority Pass (una visita por año calendario). Esto lo convierte en una opción especialmente atractiva para los viajeros que priorizan la comodidad y la calidad sobre el espacio.

Salón de champán y selección de bebidas exclusivas

Una característica clave del salón de Las Vegas es su exclusivo “salón de champán”, que ofrece copas de cortesía de Pierre Sparr Crémant d’Alsace Brut Réserve (alrededor de $20 al por menor) o Gosset Grande Réserve Brut (entre $45 y $60 al por menor). Chase anima a los invitados a probar ambos para compararlos, enmarcándolos como una oportunidad para refinar su paladar. El salón también sirve cócteles, incluido el exclusivo “Lucky 1700” con guarnición de dados.

Comida y diseño: una muestra de Momofuku

La comida es otro punto focal, con asociaciones que incluyen platos de Momofuku de David Chang, como ensalada de pepino picante, patatas nori crujientes y panecillos de cerdo. El salón ofrece un buffet y pedidos mediante código QR para comidas hechas a pedido. En cuanto al diseño, el espacio sigue la estética Sapphire Lounge que se encuentra en otros lugares, con una combinación de luz natural y cómodas zonas para sentarse. En particular, carece de comodidades como duchas, salas para la siesta o un área para niños debido a su tamaño limitado.

Preocupaciones por la capacidad y planes de expansión

El pequeño espacio que ocupa la sala VIP genera preocupación por el hacinamiento, especialmente dada su accesibilidad a través de Priority Pass. Chase ha utilizado límites de capacidad en otras salas, como la de Phoenix, para gestionar la demanda. La compañía planea una mayor expansión, con salas VIP ya abiertas en Boston, Hong Kong (que cerrará en 2026), Nueva York (JFK y LGA), Filadelfia, San Diego y Washington Dulles. La estrategia de la red parece inclinarse hacia salas VIP de alta calidad ubicadas estratégicamente en lugar de capacidad a gran escala.

Esta nueva sala VIP solidifica el compromiso de Chase de brindar una experiencia premium en el aeropuerto a sus titulares de tarjetas. Sin embargo, su pequeño tamaño probablemente creará exclusividad debido a la masificación en las horas pico, reforzando el posicionamiento de la marca como un servicio de lujo.